Tucumán histórico

San Miguel de Tucumán es la capital de Tucumán, provincia super diversa y accesible, con distancias cortas y paisajes únicos. Es una ciudad totalmente histórica que vio nacer la independencia de la Argentina.

Abundan los sitios de interés cultural que se pueden visitar, pero seleccione los más relevantes para aquellos que visiten la ciudad por primera vez: La Plaza Independencia es el corazón de la ciudad y alberga el Edificio de Gobierno y La Catedral. La casa de gobierno es el edificio público de mayor jerarquía de la ciudad y es declarado monumento histórico nacional, es de estilo barroco francés combinado con el clasicismo italiano y en su hall de ingreso descansan los restos de Juan Bautista Alberdi.

La Iglesia Catedral, también ubicada sobre la plaza Independencia, es una de las 3 iglesias más antiguas del país. Su fecha de fundación data de 1685. Cerca de ahí, se encuentra el Museo Provincial de Bellas Artes Timoteo Navarro y la Casa Padilla, declarada Monumento Histórico Nacional, que es una de las representaciones de las típicas casas chorizo de otra época.

Otro edificio es el ex hotel plaza, también sobre la plaza, Independencia, con una fachada de estilo clásico y art nouveau; la casa Nougues, el Centro Cultural Rogues, el Museo Nicolás Avellaneda, la Biblioteca Alberdi, el archivo Histórico de la Provincia, la Iglesia y el Convento de San Francisco.

También hay que mencionar los espacios verdes de la ciudad, esos que sirven de esparcimiento tanto para residentes como para turistas. Uno de ellos, es el parque 9 de julio, ideado por el frances Carlos Thays, como otros tantos parques del país y fue inaugurado para los festejos del centenario de la independencia en 1916. Cuenta con espacios para niños, rosedal, sector gastronómico, para deportes y más.

Y por último, el edificio más histórico, ese que se te viene primero a la cabeza cuando te nombran Tucumán. La famosa casita de Tucumán o correctamente llamada como La Casa Histórica de la Independencia, que es el monumento más vulnerable del país, en donde se juró la independencia Nacional el 9 de julio de 1816. Solo el salón de la jura es lo único que actualmente se mantiene de la construcción original de la casa. Fue declarada Monumento Histórico Nacional en 1941 y desde entonces funciona el Museo de la Independencia Argentina. En él, se pueden apreciar distintas obras y muestras, que algunas son permanentes y en sus dos patios, se observan diversas especies de árboles y plantas.

Además de llevarse la primera impresión de los soldados del ejército argentino que son custodia las 24 hs. La visita a la casita de tucuman es super cultural, el personal es bilingüe, funciona una biblioteca libre y gratuita, hay talleres educativos y archivo histórico y también hay una tienda de souvenirs para aquellos que quieran llevarse un recuerdito.

El imperdible, es sin duda, la puesta audiovisual “Luces y sonidos de la Independencia”, recorrido histórico sobre los fundamentos que llevaron a la independencia de Argentina